“Tu cuna fue un conventillo...”
El conventillo
Se designaba
con ese nombre, derivado de una expresión irónica española (convento como prostíbulo), a una casa
que en sus comienzos alquilaba cuartos a
inmigrantes. También se conocía como inquilinato.
Pascual
Contursi, autor de la letra de Mi noche
triste, que en la voz de Carlos Gardel, dio nacimiento al tango canción en
1917, vuelca su poesía en Bandoneón Arrabalero, donde rescata el conventillo
como convento.
Bandoneón arrabalero
Letra:
Pascual Contursi
Música: Juan B. Deambroggio
Año: 1928
Música: Juan B. Deambroggio
Año: 1928
Bandoneón
arrabalero,
viejo fueye desinflado...!
Te encontré como a un pebete
que su madre abandonó
en la puerta de un convento
sin revoque en las paredes,
a la luz de un farolito
que de noche te alumbró.
viejo fueye desinflado...!
Te encontré como a un pebete
que su madre abandonó
en la puerta de un convento
sin revoque en las paredes,
a la luz de un farolito
que de noche te alumbró.
………………………………..
Preámbulo
de la Constitución de la Nación
Argentina;
“…promover el bienestar general, y asegurar los
beneficios de la libertad, para nosotros, para nuestra posteridad y para todos
los hombres del mundo que quieran habitar este suelo argentino…”
Habitantes del conventillo
El proyecto de expansión
agropecuaria de nuestro país hacia los mercados europeos, fundamentalmente,
requería de mano de obra para cumplir el objetivo, en tal sentido se realizo la
apertura inmigratoria.
Los adelantos industriales
que estaban vigentes en Europa generaron una expulsión de mano de obra
mayormente en el sector agropecuario, esta situación a más de conflictos
sociales, políticos, guerras y situaciones de pobreza en algunos sectores,
crearon las condiciones para atender los requerimientos de nuestro país.
En un principio se aspiraba
a una inmigración anglosajona, incluso llegaron algunos pequeños grupos de
ingleses, galeses, alemanes y suizos, pero en realidad el gran aluvión
inmigratorio llego de Italia y España, desde fines del siglo XIX.
A partir de la Constitución
Nacional y a través de leyes de promoción y fomento de la inmigración, se
intento dar un marco a este proceso, no obstante la falta de acceso a la tierra
fue una de las dificultades de estos inmigrantes, como excepción se crearon
algunas colonias en el litoral: Entre Ríos y Santa Fe – la denominada pampa
gringa – y también colonias galesas en la Patagonia
En Buenos Aires y como
consecuencia del fenómeno inmigratorio,
en una ciudad apenas preparada para un cambio de tal magnitud, nació el
conventillo, previamente los recién llegados se habían instalado en el hotel de Inmigrantes.
Fue en la zona, cercana al puerto de
Buenos Aires, el
sitio más propicio para que se instalaran los inmigrantes.
A mas de los inmigrantes comenzaron a
llegar a la ciudad los habitantes de la campaña, desplazados por los cambios
que se habían producido en el sector agropecuario –alambrados, maquinaria
agrícola - el gaucho de a pie recala en estos lugares y busca su lugar de
trabajo en los saladeros, corrales, frigoríficos.
El conventillo conforma el lugar de
encuentro entre el inmigrante y el gaucho, espacio que va definiendo un cambio cultural y una nueva etapa en la Argentina.
Al quedar abandonados los caserones
del sur de la ciudad a raíz de las epidemias de fiebre amarilla y de cólera,
muchas familias se albergaron en esas enormes casas, con un patio central y
donde compartían la vida cotidiana. Por lo tanto, San Telmo, Montserrat, San Cristóbal fueron
los primeros refugios.
En general, había un patio central alrededor del cual se
levantaba una doble fila de habitaciones en la planta baja y en uno o dos pisos
superiores. En cada habitación, que carecía de ventanas vivía una familia. o un grupo de hombres solos. Los
servicios (cocina, baños) eran de uso común
para todos los inquilinos, los baños eran escasos así como las canillas para proveerse de agua la cual provenía de pozos y al no
haber cloacas , era bastante común que los inquilinos se contagiaran diversas
enfermedades. Las condiciones sanitarias se agravaban producto del hacinamiento.
Muchas veces los
conventillos se constituían en
casas residenciales en vecindarios que habían descendido de categoría
social.
En Argentina (y también en Uruguay) fue el primer hogar de muchos inmigrantes recién llegados al país. En él se
mezclaba gente de todos los idiomas y nacionalidades, principalmente españoles,
italianos, judíos y árabes, expresando una diversidad cultural y dándole el
perfil cosmopolita a la Ciudad de Buenos Aires
Los
especuladores, a su turno, no tardaron en acondicionar vetustos edificios de la
época colonial o en hacer construir precarios alojamientos para esta demanda
poco exigente y ansiosa por obtener, mal o bien, su techo.
La improvisación, el hacinamiento, la falta de
servicios sanitarios y la pobreza sin demasiada esperanza dieron marco al
nacimiento del conventillo.
Cada familia cocinaba según sus
propios gustos: los piamonteses y genoveses comían legumbres crudas, queso y
pan -los asturianos y gallegos comían tocino y pan- y los criollos comían
puchero.
En cada cuarto había un
calentador a alcohol o aceite que se colocaba en la puerta para que los olores
fueran al patio. Si la pieza estaba en la galería superior, se lo ubicaba en el
pasillo, lo cual generaba grandes discusiones por obstruir el paso.
Lugar
de convivencia de personas, de lenguas e idiosincrasias diversas, también fue
sede de reclamos comunes y de sociabilidad. Allí se forjaban nuevas familias y,
a veces, ocurrían dramas pasionales.
El
poeta y escritor Orlando Mario Punzi nos ha dejado una hermosa poesía:
“El conventillo”, en sus estrofas nos muestra, con la fuerza que lo destaca, los habitantes del conventillo;
son dignos de destacar los últimos versos que tienen una definición de una
claridad asombrosa:
……………………………………
colmena, nudo gordiano
de cien insólitas vidas,
club de las patrias perdidas,
reópolis nacional,
y auténtica sucursal
de las Naciones Unidas.
Estos habitantes del conventillo
transitan una vida de trabajo, de privaciones, pero también de alegrías,
reuniones y fiestas, en este mundo se nutren de temas el sainete y el grotesco
criollo, también los letristas de tango expresan los sentimientos que fluyen de
sus habitantes.
La
nostalgia de los inmigrantes no podría estar ausente, el sentir del italiano
queda expresado en un emblemático tango:
Canzoneta
Música: Erma Suárez
Letra: Enrique Lary
Letra: Enrique Lary
Bodegón... Genaro y su acordeón...
Canzoneta, gris de ausencia,
cruel malón de penas viejas
escondidas en las sombras del figón.
Dolor de vida... ¡Oh mamma mia!...
Tengo blanca la cabeza,
y yo siempre en esta mesa
aferrado a la tristeza del alcohol.
Cuando escucho "Oh sole mio"
"Senza mamma e senza amore",
siento un frío acá en el cuore,
que me llena de ansiedad...
Será el alma de mi mamma,
que dejé cuando era niño.
¡Llora, llora, Oh sole mio;
yo también quiero llorar!
Ya se van Genaro y su acordeón...
¡De mi ropa, qué me importa
si me mancho con las copas
que derramo en mi frenético temblor!
Soñé a Tarento en mil regresos,
pero sigo aquí, en la Boca,
donde lloro mis congojas
con el alma triste, rota, sin perdón.
Fue caldo de cultivo para la cultura popular en sus
distintas facetas; respecto a los sainetes, merecen destacarse las obras
de Alberto Vaccarezza que referencian el conventillo:
- El conventillo
de la Paloma
(1929), fue llevado al cine en 1936
- Tu cuna fue un
conventillo
(1925)
Cuando los organitos comienzan a volcar sus tangos
por las calles de Buenos Aires, al pasar por los conventillos enriquecen el sentir de sus habitantes con
este nuevo género musical, en el cual habían en parte contribuido, previamente,
a su formación.
A partir de Armando
Discepolo las historias rescatadas
por los saineteros se trasladan del patio del conventillo a la pieza, con su
encierro, su obscuridad, sus dramas íntimos y personales y se transforman en el
grotesco criollo.
El gran aluvión inmigratorio incorporo habitantes de distintos países, en
su mayoría italianos y españoles, la confluencia de estos en los conventillos
con los venidos del interior permitió un aporte de palabras de distinto origen
que fueron conformando un cuerpo propio, contribuyendo al nacimiento del lunfardo, que se va gestando desde fines del
siglo XIX hasta principios del XX.
El tango y el sainete son los
receptores más importantes del uso del lunfardo. El sainete cuyas historias se
desarrollan en los conventillos lo asume
en sus personajes quienes son proclives al uso del lunfardo.
El tango “El ciruja” es indudablemente la representación más
emblemática del lunfardo, la letra pertenece
a Alberto Marino.
Previo al lunfardo, el italiano en su
esfuerzo por hacerse entender va creando un lenguaje de transición, el
denominado cocoliche, un castellano deformado por su mezcla con el
idioma original, cada inmigrante expresaba su propio cocoliche, este no era común
al resto
El grotesco criollo de Armando
Discepolo es el disparador para incorporar estos personajes de origen italiano
con su cargas de nostalgias, angustias y demás
que expresan estos sentimientos con su vocabulario que intenta desde su
lengua de origen llegar al interlocutor que usa un idioma local, este intento
conforma un cocoliche literario creado por el autor.
Huelga de inquilinos
El
alto precio de los alquileres fue convirtiendo a los conventillos porteños en
focos de conflicto. Los cobradores debían pasar a cobrar custodiados por la
Policía.
El inquilino moroso era
desalojado por la fuerza pública. Los muebles se subían al carro municipal para
trasportarlos a un depósito. En el trayecto se evidenciaba la solidaridad de la gente, a
veces estos episodios solían culminar en batallas campales.
Debido a las malas condiciones de vida
de los conventillos y los altos alquileres, en 1907 se realizo una huelga de
inquilinos con consecuencias gravísimas en cuanto a la represión realizada y la
aplicación de la ley de residencia, expulsándose del país a los anarquistas
extranjeros.
Como protesta Nemesio Trejo escribió
el tango “Rebelión de las escobas”
Rebelión de las escobas
Señor Intendente
los inquilinatos
se encuentran muy mal.
Pues los propietarios
o los encargados
nos quieren ahogar.
A ver si Ud. puede
sacarnos el lazo
y dejarnos vivir.
Pues de lo contrario
se va a armar en todos
la de San Quintín.
Abajo la usura
y abajo el abuso,
arriba el derecho
del pobre también.
Pedimos cantando
bailando y en solfa
justicia y justicia
que nos haga usted
los inquilinatos
se encuentran muy mal.
Pues los propietarios
o los encargados
nos quieren ahogar.
A ver si Ud. puede
sacarnos el lazo
y dejarnos vivir.
Pues de lo contrario
se va a armar en todos
la de San Quintín.
Abajo la usura
y abajo el abuso,
arriba el derecho
del pobre también.
Pedimos cantando
bailando y en solfa
justicia y justicia
que nos haga usted
Aunque la lucha no fue pareja, algunos
logros respecto a la rebaja de alquileres, se obtuvieron, quedando este momento
como ejemplo ante el mundo respecto a la necesidad de unirse para obtener
resultados.
La situación vivida desnuda el
verdadero problema habitacional que se estaba gestando en la Argentina.
El conventillo en el tango
Una importante cantidad de tangos ha incorporado en sus
letras al conventillo, algunas como simple referencia y otro como en “El Conventillo”, su tema principal…
Flor de fango
Tango 1919
Música:
Augusto Gentile
Letra:
Pascual Contursi
Mina
que te manyo de hace rato,
perdoname
si te bato
de
que yo te vi nacer...
Tu cuna fue un conventillo
alumbrado
a querosén.
Justo
a los catorce abriles
te
entregaste a las farras,
las
delicias del gotán....
Te
gustaban las alhajas,
los
vestidos a la moda
y
las farras de champán.
……………………………..
El conventillo
|
1965
|
|
Letra:
Arturo De La Torre / Fernando Rolón
|
Yo
nací en un conventillo
de la calle Olavarría, y me acunó la armonía de un concierto de cuchillos. Viejos patios de ladrillos donde quedaron grabadas sensacionales payadas y, al final del contrapunto, amasijaban a un punto p’amenizar la velada. Cuando pude alzar el vuelo, pianté del barro al asfalto, pretendí volar tan alto que casi me vengo al suelo
,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,
|
Ventanita de arrabal
Tango 1927
Música:
Antonio Scatasso
Letra:
Pascual Contursi
En
el barrio Caferata
en
un viejo conventillo,
con
los pisos de ladrillo,
minga
de puerta cancel,
donde
van los organitos
su
lamento rezongando,
está
la piba esperando
que
pase el muchacho aquel
……………………………………
Las villas
Cuando los conventillos comenzaban a decaer desde el
punto de vista edilicio aunque conviviendo con los denominados Hoteles familiares, aun
hoy vigentes, ya se encontraba en pleno proceso
la instalación de las denominadas, peyorativamente, villas miseria,
villas de emergencia o simplemente villas.
Los conventillos albergaban inquilinos en
consecuencia sus alquileres representaban el gasto más importante de sus
ingresos, las villas generalmente eran
tierras ocupadas, no pagaban alquileres, aunque carecían de los más elementales
servicios y sus construcciones eran totalmente precarias.
Art.
16 de la Constitución Nacional:
“…todos sus habitantes son iguales ante la
ley…”
El gran autor que fue Armando Tejada Gómez
(1929-1994, nos ha dejado una hermosa poesía, donde expone con dureza, pero con sentimiento y hasta
orgullo el decir del villero:
Serenata de
la villa miseria
Letra: Armando Tejada Gómez
Música: Gustavo Leguizamón
Aquí mi casa está, esta es mi
casa
la fabrique con tientos de miseria
porque me andaba grande la esperanza.
Señor este es mi techo
un cielo de cartón, de lona y lata,
pero lo hice yo con estas manos.
Este es mi hogar, señor, esta es mi casa,
mis sueños son de estopa, trapo y chapa
para dormir este pedazo de hombre
que es mi hijo y con esta María sobrehumana
que me lleva al amor, es suficiente.
Este piso de tierra que es mi cama.
Estas cuatro paredes son mi
mundo,
el mundo puede ser también de tablas
para mirar por entre sus rendijas
otra vida mejor, otro mañana.
Yo vengo de cualquier parte
desde el dolor de mi tierra
y por vivir como vivo
me llaman Villa Miseria.
El origen de las villas miseria o
villas se ubica en la década del 30, en un principio como barrios o
asentamientos transitorios y posteriormente
fueron de carácter permanente,
esto dio como nacimiento a una clase social el “villero” con identidad y
estructura cultural propia.
La crisis económica del año 1930 va
expandiendo desde los países desarrollados y transmitiendo sus consecuencias al
resto, en Argentina la caída de los precios internacionales de los productos
agropecuarios de exportación afecta al mercado interno generando baja de los
ingresos de la población y una creciente desocupación.
La primera villa se considera puede haber sido la
denominada Villa desocupación, en Puerto Nuevo, asentamiento de desocupados
polacos.
En algunos lugares de Buenos Aires se
fueron creando las condiciones para estos asentamientos: el denominado Barrio
de las ranas, luego Barrio de las latas, haciendo referencia a las
características del lugar.
Donde existió el vaciadero municipal
se llevaba la basura para ser quemada, se le denomino “La quema”, en ese lugar
desocupados trataban de recolectar lo que necesitaban para consumir o vender, los denominados “quemeros”
o “cirujas”, un apocope de cirujano, por la minuciosidad con que revisaban la
basura.
El tango ha trasladado a sus letras
las referencias a estas personas y mostrando
el vocabulario lunfardo con mayor riqueza, nos referimos al tango:
El ciruja
Tango 1926
Música:
Ernesto de la Cruz
Letra:
Alfredo Marino
Como con bronca, y junando
de rabo de ojo a un costado,
sus pasos ha encaminado
derecho pa'l arrabal.
Lo lleva el presentimiento
de que, en aquel potrerito,
no existe ya el bulincito
que fue su único ideal.
Recordaba aquellas horas de
garufa
cuando minga de laburo se
pasaba,
meta punguia, al codillo
escolaseaba
y en los burros se ligaba un
metejón;
cuando no era tan junao por
los tiras,
la lanceaba sin tener el
manyamiento,
una mina le solfeaba todo el
vento
y jugó con su pasión.
Era un mosaico diquero
que yugaba de quemera,
hija de una curandera,
mechera de profesión;
pero vivía engrupida
de un cafiolo vidalita
y le pasaba la guita
que le shacaba al matón.
Frente a frente, dando
muestras de coraje,
los dos guapos se trenzaron en
el bajo,
y el ciruja, que era listo para el tajo,
al cafiolo le cobró caro su
amor.
Hoy, ya libre'e la gayola y
sin la mina,
campaneando un cacho’e sol en
la vedera,
piensa un rato en el amor de
su quemera
y solloza en su dolor.
La imposibilidad de importar por falta
de recursos, genero en algunas industrias la posibilidad de crear un modelo de
sustitución de importaciones, estas fabricas comienzan una demanda de mano de
obra que atrae a muchos habitantes del campo, desplazados por la incorporación
de maquinarias.
Ya estaban dadas las condiciones para
un rápido crecimiento de las villas, posteriormente el ingreso de inmigrantes
de países vecinos atraídos por mejores condiciones laborales se vuelcan a este
nuevo modelo habitacional.
La denuncia social que Jose Hernandez
pone en la voz del gaucho Martin Fierro, hoy sigue instalada en la sociedad,
aunque las cuestiones no son las mismas, pero si las agresiones a algún sector
que al igual que el gaucho sufre la marginación y el desprecio:
|
Derechos humanos y humanos sin derechos:
Mas allá de la marginación que sufren los habitantes de las villas,
esta situación se ha agravado en los últimos años al tomar estado publico la existencia de una gran cantidad de
argentinos que están viviendo en la calle, en situación de vulnerabilidad y en
permanente exposición a todo tipo de riesgos, estos conforman el grupo más
marginado y excluido de la sociedad.
En nuestro país goza de jerarquía
constitucional, según el inc. 22) del art. 75 de la Constitución Nacional, la Declaración Universal de Derechos humanos que en su art. Artículo 25: expresa: “Toda
persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure, así como a su
familia, la salud y el bienestar, y en especial la alimentación, el vestido, la
vivienda, la asistencia médica y los servicios sociales necesarios…”
Bibliografía
consultada:
GARCIA, Mariano – Historia de las villas miseria en Bs.
Aires
PIGNA, Felipe – La crisis económica de 1930
CORTESE, Luis O.- Los conventillos
PIGNA, Felipe – Historia de los conventillos
www.todotango.com.ar
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